Ventresca de atún claro - CANUMI para perros

  • En oferta
  • Precio habitual €3,50
Impuesto incluido. Los gastos de envío se calculan en la pantalla de pagos.


Ventresca de atún claro - CANUMI para perritos

¡Atención a todos los amantes de los perritos!

¿Estás buscando una deliciosa y saludable manera de cuidar a tu mejor amigo de cuatro patas? No busques más. Tenemos la solución perfecta para ti: Esta Conservas de Atún Claro para perritos, diseñadas específicamente para mejorar su desarrollo cognitivo, desde nuestros amigos de Canumi.

Estas conservas están elaboradas con 120 gramos de atún claro cocinado al vapor y sin sal. El atún es una fuente rica de ácidos grasos omega-3, esenciales para el desarrollo cognitivo de tu perroAdemás, son el resultado de un proceso artesanal, cocinadas con cariño y dedicación.

Al ser un pescado azul los ácidos grasos insaturados omega 3 (EPA y DHA), son conocidos por proteger el corazón, reforzar la circulación y prevenir enfermedades cardíacas, también es una fuente rica en potasio, lo que ayuda a reducir la presión arterial.

Son ideales para premios saludables, ya que no contienen aditivos innecesarios ni conservantes artificiales. Además, son muy prácticas para llevar en tus aventuras al aire libre o en viajes, proporcionando una comida sabrosa y nutritiva en cualquier momento y lugar.

No escatiman en esfuerzos para garantizar la calidad y la frescura de estas Conservas de Atún Claro para perritos. Invierte en la salud y la felicidad de tu peludo amigo hoy mismo. ¡Su cola no dejará de moverse de alegría!

TIP: No deseches el agua de las latas, ya que contiene valiosos nutrientes, como minerales (magnesio, potasio, fósforo, calcio, zinc, yodo), vitaminas (A, D, E, y del grupo B), y Omega. Además, proporciona hidratación. ¡Aprovecha estos beneficio!

TIP EXTRA: Imagina que has abierto la latita pero tu amidog no ha consumido todo... No te preocupes. Tenemos tu solución. La mejor manera de conservar las propiedades de las conservas es en un frasco de cristal, sumergidas en su propio líquido, y en la nevera por un máximo de dos días. Esto previene el crecimiento de bacterias y preserva su calidad.